Real Monasterio de Nuestra Señora de Guadalupe Turismo Cáceres

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Real Monasterio de Nuestra Señora de Guadalupe Turismo Cáceres

Cuenta la leyenda que, a principios del siglo XIV, en los valles de Las Villuercas, el pastor Gil Cordero buscando una res perdida de su rebaño, la encontró muerta. Cuando se disponía a descuartizar el animal, éste volvió a la vida. En ese instante se le apareció la Virgen al vaquero, que le transmitió su deseo de que anunciara el prodigio y excavara en el mismo lugar en el que encontró su vaca muerta. Allí apareció la imagen de Santa María de Guadalupe y rápidamente se difundió su fama de milagrosa.

El rey Alfonso XI escuchó los relatos milagrosos que se contaban de la Virgen y se hizo devoto de Santa María de Guadalupe, encomendándose a Ella antes de la famosa Batalla del Salado, de la que salió victorioso a pesar de la inferioridad numérica de sus tropas. Agradecido, peregrinó hasta Guadalupe y concedió a su humilde iglesia privilegios y rentas que permitieron la construcción de su santuario.

La fama de Guadalupe se extendió con rapidez y pronto se convirtió en el centro devocional de todo el sur peninsular. Llegaron poco después los monjes Jerónimos, que custodiaron el santuario desde 1389 hasta 1835, pasando varias décadas sin la protección de orden religiosa alguna, hasta que en 1908 aceptan hacerse cargo del Monasterio los Franciscanos.

El 12 de octubre de 1928 la Virgen de Guadalupe fue coronada canónicamente Reina de las Españas y en 1907, fue nombrada Patrona de Extremadura.

Desde entonces, el monasterio se ha convertido en la referencia espiritual de Extremadura, que celebra su patrona cada 8 de septiembre, el mismo día de la fiesta de la Comunidad Autónoma de Extremadura.

La fachada principal del monasterio es mudéjar, igual que uno de sus dos claustros, el segundo es gótico. Guarda importantes libros miniados, bordados, relicarios, obras pictóricas del artista extremeño Zurbarán, de El Greco y otros pintores, esculturas, orfebrería y bronces, transformándose en un auténtico guardajoyas que encierra en sí varios museos: el de Bordados, el de Libros Miniados y el de Pintura y Escultura.

El templo es gótico, del siglo XV; el coro y la sillería son obras de Manuel de Larra Churriguera. La imagen de la Virgen de Guadalupe data de los siglos XII-XIII. En la sacristía se guardan ocho obras del célebre pintor Francisco Zurbarán. El Real Monasterio fue declarado Monumento Nacional en 1879 y posteriormente, en 1993, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.